Navidad en Zimbabue

Después de Zambia, el Promotor General viajó más hacia el Sur, a Zimbabue, donde se quedó desde el 22 al 27 de diciembre. Fue allí, donde celebró el Nacimiento del Señor. Como en el país visitado anteriormente, le acogieron las Hermanas dominicas misioneras del Sagrado Corazón, en la capital, Harare, y luego en el centro del país, en la misión de Loreto, en plena selva.

En Zimbabue, las hermanas de esta congregación realizan un trabajo impresionante en el dominio de la educación. Han fundado la primera escuela para niños sordos del país. Esta escuela, instalada inicialmente en la selva, ha sido desplazada a la capital, en el barrio residencial de Emerald Hill. Fue allí donde fue alojado el Promotor.

A partir de allí, fueron organizados varios encuentros con las hermanas de diferentes comunidades de la ciudad: la de Emerald Hill, evidentemente, luego la de House of Adoration –una comunidad numerosa de hermanas mayores, la mayoría de ellas alemanas- y por fin la de la escuela San Juan. Durante cada uno de los encuentros, el trabajo del Promotor y los proyectos para el próximo Jubileo de la Orden fueron presentados. Estos encuentros fueron una excelente ocasión de hermosos intercambios fraternos.

Para Navidad, Sor Pelagia Siziba, la superiora regional de la congregación, organizó una expedición al centro del país. Escogió la misión de Loreto para las fiestas del Nacimiento del Señor. Una misión completamente perdida en medio de la selva. Allí, las hermanas realizan un magnífico trabajo con los niños y los jóvenes.

A causa de una fuerte tormenta, nos quedamos sin luz y celebramos la Nochebuena... ¡en plena oscuridad! La única luz venía de los dos cirios colocados sobre el altar. Resultó una misa realmente única, en la oscuridad, bajo los redobles de los tam-tames y ¡en medio de los murciélagos!

Belén… ¡en Loreto!